No Pongas Excusas y Acepta la Invitación
Lc.14:15-24
Creo que muchos de nosotros debiéramos de
meditar más en la invitación generosa que nos hace a todos el Sr a participar
de su gracia salvadora. Y sin duda hay en su iglesia abundante provisión. C-to invitó a todo el pueblo de Israel a
participar de las bendiciones del reino y de los beneficios del evangelio, y al
ellos rechazarla, esta misma invitación se nos extendió a nosotros los gentiles
para participar en la casa de Ds. La
casa de C-to es muy buena, u Iglesia está abierta para todos los que desean y
aceptan su invitación a salvación. La invitación es apremiante” “Venid, que
todo está ya preparado (v.17) Si, ahora
es el tiempo aceptable; ahora es el día de salvación, sin excusas venid. ¿Qué dudas tienes de esta invitación? Por qué
las excusas? Todo está preparado; “No tardéis:
acepta la invitación. Recuerda la voz
del E.S que dice: (2 Cor.6:2) “En tiempo aceptable te he oído; y en día de
salud te he socorrido.”
JES en tiempo de salud y necesidad te ha
escuchado. Él a nadie rechaza, Él así lo
ha dicho, “Al que a mi viene, no le echo
fuera” Jn.6:37. Tristemente son los
hombres los que no quieren venir a Él para que tengan vida. Jn.5:40 “Y no queréis venir a mí, para que tengáis
vida.” La palabra clave es
>>No queréis<< esto explica la triste condición de todo aquel que
no recibe a C-to. ¿Qué excusas pondremos
contra una doctrina pura, divina? Jn
7:16 “Mi doctrina no es mía, sino de
aquel que me envió.” NO es doctrina de hombre o un invento de palabras o
fábulas, es enseñanza, instrucción, doctrina del Padre celestial, revelación
Divina. Es por eso que nuestro corazón tiene que ser recto sin excusas, que de
él salga una doctrina pura y de ese corazón recto y deseoso de conocer y hacer
la voluntad de Ds y no la nuestra.
Jn. 7:17 “El
que quiere hacer la voluntad de Ds conocer así la doctrina es de Ds, o si yo
hablo por mi propia cuenta.” JES en
Jn.5:40 va a la raíz del problema: “No queréis” y con las excusas muestras la
actitud de la parábola de “la Gran Cena”, es una actitud hostil en contra de su
invitación, con tus excusas quieres encubrir los perversos motivos que anidas
en tu interior. Tristemente muchos
quieren cobijar sus excusas y se hacen ellos mismos víctimas de sus
enredos. La gente no se condena por
falta de luz, sino por falta de voluntad propia. Un corazón en tinieblas impide que la mente
funcione razonablemente. Aquellos que han conocido a Ds y han gustado del don celestial
¿cómo se han de ir tras sus excusas?
Pero a algunos les cuesta glorificarle, no tienen tiempo para darle gracias por la
triste razón que estos se van tras sus excusas, formando sus propias ideas y
sus discursos, y así se van desapareciendo en la misma iglesia, pues el necio
corazón de ellos fue entenebrecido, Rom.1:21. ¡Qué respuestas tan dolorosas y
frías hacemos a la gracia de C-to con nuestras excusas! La respuesta fría, “no quiero, no siento
nada, es que no tengo fe” descortés y despectiva es la respuesta que la gracia
de Ds recibe de estas personas. Desde el
verso 18 comienzan las excusas. Cuantos de vosotros encontramos pretexto tras
pretexto u otro motivo para no acudir a la iglesia o a las fiestas
espirituales. Yo se que algunos no se atreven a rechazar de plano la invitación
del evangelio, pero ponen toda clase de excusas para no entregarse al Sr. v.18 <<todos a una se
excusaron!>> Hay personas que se
unen a grupitos por conveniencia para apoyarse en las excusas, aunque con
diferentes justificaciones, no obstante unánimes en el rechazo.
Lc.14:18, El primero le dijo: “He comprado un campo, y necesito ir a
verlo: te ruego que me excuses.” Una excusa superficial, como si no pudiese
ir a ver le campo el día siguiente! Y, sin embargo, alega “necesidad” cuando lo
que tiene es falta de voluntad. Recordemos el verso de Lc.13:34 “No quisiste.” El primero se excusa
y alega “necesidad” el segundo se excusa y alega “inconveniencia.” Otro
dijo: “He comprado cinco yuntas de bueyes
y voy aprobarlos” v.19. ya está en marcha a probar sus bueyes y le resulta
incómodo cambiar sus planes, ¡pobre excusa, cuando se trata de una invitación a
participar en el banquete del Mesías! En comparación de tal privilegio, ir a
probar cinco yuntas de bueyes no tenía la menor importancia, la excusa indica
aquí cierta convicción del deber, pero ninguna inclinación a cumplirlo.
Por aquí vemos que aun las cosas que de suyo
son legítimas pueden tener fatales consecuencias cuando de tal manera absorben
el interés, que dan ocasión a que el corazón se aparte de lo primordial. Recordemos- Mt. 6:33 <<el Reino de Ds y
su justicia>> El tercero dijo: “Acabo de casarme, y por tanto no puedo ir.”
>> v.20, este es el más grosero y descortés de los tres, porque el
primero alega una falsa “imposibilidad”, los otros dos no podían llevar al
banquete su campo o sus bueyes, pero este podía haber llevado consigo a su
mujer y ambos habrían sido bienvenidos.
Los otros dos han presentado excusas, aunque insuficientes; pero este no
tenía justificación, estaba libre para acudir a un banquete. Pretexto tras pretexto, excusa tras excusas,
¡cuántos son los que se olvidan del voto hecho a Ds y a la Iglesia, y otros
totalmente de los deberes del evangelio por los placeres de esta vida! La
ingratitud de quienes toman a la ligera la invitación del Evangelio y el
desprecio con que de este modo tratan “las riquezas de la benignidad de Ds.” Estos con sus excusas provocan contra la
justicia de Ds. El abuso de la misericordia
divina conduce a lo más terrible, ¡la ira del Cordero! Ap.6:16. Por eso dice el Padre de familia, “Os digo que ninguno de aquellos hombres que
fueron convidados, gustarán mi cena,” v.24.
La gracia despreciada es una gracia perdida,
como la primogenitura de Esaú. Los que
no quieren recibir a C-to cuando pueden, no podrán tenerlo en el momento
previsto por ellos, aunque así como Esaú, lo procuren con lágrimas. Por eso tú !No pongas excusas y acepta la
invitación!
Apóstol
Caesar Rivera
No hay comentarios:
Publicar un comentario