Grande Milagros

Grandes Milagros

     A Pablo le muerde una víbora en la isla Melita, Hechos 28:3-6

3 Entonces habiendo Pablo recogido algunos sarmientos, y puéstolos en el fuego, una víbora, huyendo del calor, le acometió á la mano.

4 Y como los bárbaros vieron la víbora colgando de su mano, decían los unos á los otros: Ciertamente este hombre es homicida, á quien, escapado de la mar, la justicia no deja vivir.

5 Mas él, sacudiendo la víbora en el fuego, ningún mal padeció.

6 Empero ellos estaban esperando cuándo se había de hinchar, ó caer muerto de repente; mas habiendo esperado mucho, y viendo que ningún mal le venía, mudados, decían que era un dios.

     Aquí podemos ver como Pablo fue librado de la muerte, Dios lo tenía preparado para algo especial, la gente de ese lugar estaba esperando cuando iba a caer muerto, pero
Dios lo tenía protegido, y allí miramos el poder de Dios, sobre sus siervos, que escena han de haber visto esas personas, se quedaron maravillados de tal forma que pensaban que era un dios. No cabe duda que al poder de Dios no le podemos poner limite.

     En tiempos de Eliseo una Hacha flotó, 2 Reyes 6:1-7

1 Los hijos de los profetas dijeron á Eliseo: He aquí, el lugar en que moramos contigo nos es estrecho.

2 Vamos ahora al Jordán, y tomemos de allí cada uno una viga, y hagámonos allí lugar en que habitemos. Y él dijo: Andad.

3 Y dijo uno: Rogámoste que quieras venir con tus siervos. Y él respondió: Yo iré.

4 Fuése pues con ellos; y como llegaron al Jordán, cortaron la madera.

5 Y aconteció que derribando uno un árbol, cayósele el hacha en el agua; y dió voces, diciendo: ­Ah, señor mío, que era emprestada!

6 Y el varón de Dios dijo: ¿Dónde cayó? Y él le mostró el lugar. Entonces cortó él un palo, y echólo allí; é hizo nadar el hierro.

7 Y dijo: Tómalo. Y él tendió la mano, y tomólo.

     En esta parte de la historia de la palabra de Dios, podemos notar como vivían los hijos de los profetas, y las necesidades que pasaban, no tenían lujos tampoco grandes casas, entonces se fueron a vivir al Jordán, para habitar en ese lugar, y al cortar un árbol a uno se le cayo el hacha en el agua, por consecuencia se hundió, ya que es hierro, pero allí estaba el profeta Eliseo, el cual hizo nadar el hierro y así recuperar el hacha, ¿como puede pasar esto? solo el poder de Dios.

     A la orden del Señor se saca una multitud de pescados, Lucas 5:4-7

4 Y como cesó de hablar, dijo á Simón: Tira á alta mar, y echad vuestras redes para pescar.

5 Y respondiendo Simón, le dijo: Maestro, habiendo trabajado toda la noche, nada hemos tomado; mas en tu palabra echaré la red.

6 Y habiéndolo hecho, encerraron gran multitud de pescado, que su red se rompía.

7 E hicieron señas á los compañeros que estaban en el otro barco, que viniesen á ayudarles; y vinieron, y llenaron ambos barcos, de tal manera que se anegaban.

     Cuando el Maestro manda tirar la red a alta mar, Pedro ya había estado tratando de pescar en ese lugar, sin haber logrado nada, pero como recibe la orden dice "En tu palabra echaré la red" y vemos como surge el milagro, pues sacaron una gran multitud de pescado. aquí nos podemos dar cuenta que cuando el Maestro da la orden, hay que obedecer, porque en su palabra está el poder.

     La humanidad no quiere aceptar este milagro, pero nuestro Dios es Todopoderoso, la mar se divide en dos, Éxodo 14:21

21 Y extendió Moisés su mano sobre la mar, é hizo Jehová que la mar se retirase por recio viento oriental toda aquella noche; y tornó la mar en seco, y las aguas quedaron divididas.
     Dios ya tenia dicho que su pueblo iba a ir a adorarle, y cuando Él tiene dicho algo no hay poder humano que lo detenga, Egipto pensó que podía en su fortaleza detener al pueblo de Dios, pero estando cerca del mar, una vez más el Todopoderoso demuestra su poder, y divide las aguas en dos, solo el poder de nuestro Dios lo puede hacer, y su pueblo paso el mar rojo por en medio sin mojarse.
     Que bendición poder servir a Dios, que privilegio ser su siervo, es tiempo de reconocer que somos muy pequeños, pero con un Dios único. Bendiciones para todos los que leen este escrito.